27 de enero de 2010

Una visita al pasado



Fotos: Dani Miquel /Cutre

Hace unos meses cuando me quedé sin sponsors de velas, decidí empezar a navegar con material que pudiera recopilar. Me daba igual que marca y de que material fuera la vela, todo servia para poder entrar al agua a disfrutar. Gracias a todas las personas que me apoyan y están a mi lado hice un set de velas entre ellas velas del tela con sables (lo mejor la neilpryde combat de tela con estampado tipo leopardo, se acuerdan de ella?), jajjaja... Bueno la verdad es que todo se quedó ahí desde que conseguí la ayuda Secret Sails. Pero siempre se quedó la coña de que un día teníamos que navegar con velas triangulares de tela.

Pues el lunes, Pablo, que venia de Tenerife, se trajo unas velas de tela triangulares... entonces lo que en un principio era una broma se convirtió en una extraordinaria experiencia.

Pablo entró al agua con una Depooter 4,5 con algunos sables (concretamente con una vela igual a la que utilicé yo para aprender a navegar), y yo con una Sailboards de 4.8 sin sables. Esas velas llevaban una botavara enorme. Mientas que Pablo con una botavara de 220 pudo llegar a envergar mas o menos bien la vela, en mi caso me faltaba al menos 30 cm de botavara. Pero eso no fue impedimento para la experiencia. Pero para mi fue un suplicio, era casi imposible hace el waterstar y si conseguías levantarte solo podías navegar al largo (la vela tenia una bolsa que sobresalía que enrollaba la botavara, jajajaj... En cambio Pablo, que si pudo montar mas o menos la botavara, puedo pegarse algunos largos y algunas surfeadas, pero aun así sintió que era muy difícil e incómodo navegar con estas velas. Tiraban mucho del puño de escota, lo que te obligaba no solo a cazar vela con la mano de atrás, sino también a empujar con la mano de alante, la tabla todo el tiempo te hacia spin out,... QUE AFORTUNADOS SOMO DE PODER NAVEGAR CON EL MATERIAL DE HOY EN DIA. Antes eran como superhombres.